Camilo Soñez analiza la fecha histórica en el contexto actual.

Por Camilo Soñez *
Una de las tantas formas de entender la realidad actual de un país es entendiendo la historia de sus sectores populares, pero sobre todo de sus élites. Hay que entender ambas, pero sin olvidarse que las responsabilidades no son las mismas, ya que las élites decidieron la mayoría de las veces y las mayorías populares las menos.
En ese sentido, entre 1810 a 1860 las élites argentinas se debatían entre seguir alineadas, sobre todo culturalmente, con España (potencia en decandencia) o alinearse con Inglaterra (potencia en auge), ya a partir de 1861 esa discusión se salda a favor a de esta última, y desde 1880 es un hecho concreto. La alineación política, cultural y económica es total.
Ya para 1930, cuando la hegemonía británica estaba en decadencia y la norteamericana en alza, las élites argentinas siguieron alineadas económica-cultural-política-ideológicamente con los británicos. Para 1940 era obvia la supremacía americana sobre la inglesa, Federico Pinedo lo veía y lo decía con claridad, pero hasta no finalizada la Segunda Guerra Mundial las élites políticas y económicas, y buena parte de la élite militar, se risisitio a ese re alineamiento de la Argentina con Estados Unidos.
Entre 1945 y 1955 llega Perón, y es cuando tenemos el modelo de desarrollo nacional no alineado, recién a partir del golpe de 1955 y en particular desde Arturo Frondizzi es que tenemos la alineación de toda la élite nacional con la nueva potencia mundial. Hablamos de unos 28 años tarde como minimo, aunque claro está que en esa dirección trato de ir la Union Democrática en 1945 cuando enfrenta a Perón en las elecciones.
Hoy en el marco de este aniversario número 47º del paso a la inmortalidad de Juan Domingo Perón y en el aniversario 100º del Partido Comunista Chino, vemos aún como las élites nacionales, siempre retardatarias, lejos están de agiornarse a los nuevos procesos mundiales.
Incluso a pesar de que hoy China ya es el principal socio comercial de la Argentina, que la mayoría de lo dólares que hoy están el BCRA son de origen chino, tanto por el swap como por los dólares de libre disponibilidad producto de la liquidación de divisas del campo, y aún así nuestras élites políticas y económicas, se muestran lentas de reflejo. Recordemos que más de la mitad de la soja que exportamos va a China y en mayor magnitud la carne.
Si les llevó décadas a la elite nacional, y caro les salió, seguir alineada a potencias decadentes (primero España y después Inglaterra), y eso que eran potencias que estaban del otro lado del Altlantico, no me quiero imaginar lo que les va a llevar la realineación actual, 51 mil millones de dólares de deuda con el FMI (Reserva Federal + Departamento de Estado) mediante.
Pero lo hagamos cuando lo hagamos (mejor tarde que nunca) habrá que hacerlo con una perspectiva de desarrollo sudamericano y pensando no sólo en los micro intereses de una elite decante (ej: Pacto Roca-Runciman), sino en las ventajas relativas de esta parte del mundo, o sea la biodiversidad y multiculturalidad.
Cierto es que Estados Unidos no es un actor pasivo, y la única forma de sobrevivir que tiene, es pensar en una integración “real” con el resto de los países de America, y no como patio trasero de donde sacar y proveerse a su antojo de lo que quiera, como quiera y cuando quiera, su única oportunidad esta ahí, en no repetir los errores de España e Inglaterra. Pero sabemos que generalmente los imperios no pueden escapar a su propia lógica interna, y caen.
Esperemos nosotros, como gran nación sudamericana, si podamos estas vez pensarnos de manera autónoma, de una forma no dependiente, aunque si integrada al mundo.
A la memoria de José de San Martín libertador de Argentina, Chile y Perú.
* Coordinador de Derechos Humanos de la Municipalidad de Paraná