El secretario General sostiene que los docentes están trabajando más. “Vamos hacia la quiebra de más de una obra social”, advierte también Pesoa sobre el sistema de salud sostenido por los sindicatos.
Cómo atraviesan los docentes el trabajo durante la pandemia
“El momento de por si es muy complicado. Lo que se ha hecho ahora es un cambio real en el contexto de las condiciones de trabajo”, dice Sergio Pesoa, secretario General del Sindicato de docentes Privados (SADOP) de Entre Ríos, ante la pregunta de Entre Ríos Diario respecto de cómo atraviesan los decentes este momento. Al respecto se explaya: “El docente fue trasladado desde su contexto natural, que es el aula, a su casa. Y esto ya comienza a generar una desigualdad en el sentido de que no todas las casas tienen los medios para dar clases. No todos tienen el mismo acceso a internet, un escritorio, infraestructura”.
“Tampoco es lo mismo ser docente de un curso que ser un profesor con muchas horas cátedras y en cada curso tener 25 o 30 alumnos. La mayoría nos dice que está trabajando más que cuando trabajaba en el aula. Por ejemplo, como los alumnos responden con sus tiempos, el docente está más tiempo que el que corresponde a su hora”, advierte el dirigente sindical sobre las horas de trabajo en contexto de aislamiento social, preventivo y obligatorio.
“Al ser una situación totalmente desconocida para toda la comunidad educativa, nadie supo en un primer momento establecer los criterios concretos para llevarlo a cabo. Entonces hubo en los primeros días una lluvia de actividades que sobrecargaron al docente. Todo esto hace un combo y se suma”, observa Pesoa.
“También la desigualdad se plantea para el alumno. Por ahí pensamos que todos cuentan con la infraestructura pero no es así”.
“Otro aspecto es que los padres pasaron a cumplir un rol de tutores de la actividad pedagógica que normalmente no se da. Entonces, por ahí, el padre no está tampoco totalmente preparado para este acompañamiento”, especifica.
“Como dice el ministro de Educación de la Nación -Nicolás Trotta-, esto es un acompañamiento y una utilización del tiempo como aprovechamiento de la inserción de contenidos que en algún momento serán evaluados y serán útiles para la continuidad del proceso pedagógico”, advierte y agrega: “La escuela es irremplazable, la comunidad educativa es irremplazable. Ahora se da esto de que todos toman consciencia. No solo los contenidos de la escuela, la comunidad”.
La problemática de los salarios
“La preocupación por los sueldos, que en muchas de las escuelas privadas está atada al pago de cuotas. Cada escuela reaccionó con sus particularidades y, por ahora, no hemos tenido problemas serios ni por falta de pago ni, mucho menos, despidos.
El pago de las cuotas en los colegios
“El primer mes tal vez no se vio pero los próximos meses va a ser un problema. Normalmente hay un 80% que se paga y un 20% que no se paga. Ahora, están temiendo -la patronal- que haya un 50% la cantidad de cuotas que no se pague. Entonces, ¿cómo hace una escuela en donde las cuotas van directamente al sueldo de los docentes pero esta cuota no se paga? Los padres pueden tener la intención de pagar pero quizás no pueden”, cuenta Pesoa y recomienda a los docentes: “En este contexto, bregamos e insistimos en que cada docente sea su propio inspector de trabajo y nos reporte y denuncie si hay algún tipo de problemas con el trabajo o la relación laboral”.
El problema de las obras sociales sindicales
“Estamos ante un panorama muy complejo, muy complicado. Si no viene un auxilio esto va camino a un agujero negro del cual nadie va a poder salir. La cadena de pagos ya está en un hilo”, responde Sergio Pesoa cuando se le consulta por la situación de las obras sociales sindicales, que representan un tercio del sistema sanitario argentino. “Ahora, sin el aporte patronal, vamos hacia la quiebra de más de una obra social. Porque no tenés ingresos de dinero para pagar a los profesionales ni a los proveedores”.
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