"Buscamos lo que llamamos revinculación con el ambiente natural", explicaron desde A Ñangarecó Nderejhé.

El abogado Dante Gariboglio, referente de A Ñangarecó Nderejhé, la asociación civil ambientalista que tiene ahora la tutela del islote Curupí, sostuvo que la intención de la institución es lograr el acercamiento de paranaenses y turistas a los ámbitos naturales de la ciudad, y que para eso cuentan con el respaldo de la Municipalidad de Paraná. “Hemos cruzado al islote Curupí a más de 1.800 chicos en este período. Algunos chicos vienen por sus propios medios, y tenemos anotado, con un programa que desarrolla la Municipalidad de Paraná con el Ente de Turismo, más de 800 chicos para cruzar en octubre. Y una tarea que no es menor es la tarea articulada con los centros educativos de integración. Nos llena el alma recibir a toda esa gente”, dijo en diálogo con radio Costa Paraná.

Gariboglio se explayó sobre el programa turístico-ambiental. “Buscamos lo que llamamos revinculación con el ambiente natural. Es un turismo muy lindo porque lo que tratamos de mostrar es cómo funciona el ecosistema fluvial, para qué sirven las lagunas interiores, cómo están conformadas las islas, las especies de flora y fauna que habitan allí y, sobre todo, poner en conciencia la importancia de estos lugares como espacio de reproducción de las especies. Es una propuesta turística muy linda porque permite atravesar el río, pararse frente a la ciudad, con una mirada totalmente distinta, en un ambiente natural, autóctono, que nos saca de la urbe a una vida totalmente natural, con mucho silencio y tranquilidad y todo acompañado con una guía que cuenta las historias y anécdotas del lugar, cómo se conformó, las propiedad de las plantas, las característica de las aves”, declaró el entrevistado.

El referente ambiental sostuvo que “por suerte está apareciendo nuevamente la fauna autóctona que había sido diezmada”. “Nuevamente tenemos en el islote representantes de la fauna autóctona, como por ejemplo unas nuevas familias de carpinchos; han aparecido yacarés y también lagartos que han empezado a caminar por la pasarela y son también un atractivo del lugar”.

En la charla radial se habló de los daños y robos que se hicieron en la isla y se reflexionó sobre el cuidado de los espacios públicos. Cabe recordar que desde A Ñangarecó Nderejhé, encargada del diseño, desarrollo, planeamiento y gestión ambiental del Islote Curupí, denunciaron que la semana pasada, personas desconocidas llegaron hasta el humedal para causar distintos tipos de daños. Según los datos aportados por la entidad se pudo constatar la sustracción y vandalización de un sector de los senderos elevados.

“Más allá de la cuestión material, obviamente, a nosotros nos pega esa falta de conciencia social, venga de donde venga. Nosotros no sabemos quiénes fueron, no nos interesa buscar en ese sentido. Creo que son pocos los actores que hoy quedan con esta cuestión de no entender por dónde pasa. Porque, en realidad, esto es un esfuerzo real de la gente de la asociación. Acá hay un aporte municipal de los fondos y también hay un trabajo de personas que ponen su esfuerzo para que esto se construya. A su vez, esto es un terreno público y su destrucción repercute, sin dudas, en el erario público. La reconstrucción fue dificultosa y hay que encarar un proceso de construir sobre lo construido”.

El islote Curupí se inauguró oficialmente en abril de este año, en el marco de las actividades turísticas de la Semana Santa. Se convirtió así en una de las propuestas turísticas más atractivas de la ciudad.

La puesta en valor es un proyecto turístico, cultural y ambiental impulsado por la asociación A Ñangareco Nderejhe, con el apoyo de la Municipalidad de Paraná.

 

Fuente: Radio Costa Paraná – Entre Ríos Diario